¿No es acaso lo que todos nos preguntamos? Con la cara pintada, un gorro con piel y cuernos de búfalo, el torso desnudo y con una bandera de Estados Unidos, Jake Angeli se volvió un ícono en la toma del Capitolio.

Más allá de los memes del joven de tatuajes celtas y vestiduras sioux, Angeli sostiene una de las teorías conspirativas más divulgadas entre la ultraderecha que respalda a Donald Trump y repudia el ascenso de Biden al poder. 

El joven,  conocido también  como Q-Shaman integra QAnon, un movimiento que sostiene la existencia de una sociedad secreta del poder que involucra a dirigentes del Partido Demócrata y que tiene en su nómina un extenso listado de famosos y empresarios satánicos y pedófilos.

Desde 2019, Jake Angeli  usa el gorro de piel, se pinta la cara y camina sin camisa como una forma de captar la atención de la gente  y  manifestarse en contra del gobierno por cierres de empresas, y recientemente la impugnación de las elecciones presidenciales del noviembre , que ubicaron a Biden como ganador.

En entrevistas brindadas, Angeli contó que llegó a formar parte del movimiento QAnon de ultraderecha luego de "investigar en Internet" y darse cuenta  "de que las piezas encajaban". El estado profundo que controla Estados Unidos y el resto del mundo, según esta teoría, es una entidad de élite.

El expresidente Barack Obama,  Bill Clinton, Hillary Clinton,  Tom Hanks, Oprah Winfrey y Lady Gaga, además de Soros y Bill Gates, conformarían la nómina de involucrados. 

A Q se le sumaron los movimientos supremacistas blancos, antivacunas y antisemitas entre otros grupos que comparten la teoría y encuentran relación con Pizzagate (el movimiento que concluyó que los pedidos de pizza de queso que el político hacía a un restaurante de Washington eran códigos para hablar de pornografía infantil)-

Trump, encontró en este movimiento un apoyo y aliado, a quien nunca detuvo ni negó en sus teorías.